VQJ – Capricho de Gaudí
REHABILITACIÓN INTEGRAL DE VILLA QUIJANO (EL CAPRICHO DE GAUDÍ)
Tipo: | CULTURAL | |
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Cliente: | EL CAPRICHO DE GAUDÍ, S.A. | |
Tamaño: | 725 m2 | |
Localización: | COMILLAS - CANTABRIA | |
Estado: | OBRA ACABADA (F.I) / EN CONSTRUCCIÓN (F.II) | |
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AUTORES DEL PROYECTO: DAVID CEBALLOS RODRÍGUEZ + CARLOS A. GÓMEZ SANTOS
COLABORADORES: B&P BÁSCONES Y PÉREZ ESTRUCTURAS, I.T.M. INSTALACIONES, M.I.A. ESTUDIOS APAREJADORES
PROPIEDAD: EL CAPRICHO DE GAUDÍ, S.A.
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El verano de 2016 recibimos el encargo de rehabilitar y ampliar el área expositiva de la Villa Quijano, con el fin de consolidar el edificio en sus plantas superiores y dar a conocer al público aquellas estancias hasta ahora cerradas. Supone una gran suerte, una gran reto y una gran aventura poder analizar y dialogar con el trabajo de uno de los mayores genios de la historia de la arquitectura.
Siempre nos fascinó el atrevimiento y la elocuencia de un joven recién licenciado, con la osadía y valentía que reflejó en el proyecto, sin poder siquiera encasillarse en ninguna corriente definida, liberando toda la imaginación en una propuesta diferente y diferenciadora, donde destaca la unidad global del edificio, como metáfora tangible de los sueños y pasiones del arquitecto, naturales y musicales.
Bien de Interés Cultural desde 1969, toda la fachada está modulada según la métrica de un azulejo de 15×15, destacando el impreso, original, del girasol, que da nombre al edificio, y los coloridos vidriados que lo acompañan. En este sentido, nos parece realmente impresionante como, más allá de toda la imaginación y locura del proyecto, todo está absolutamente definido, medido y delimitado, con una única métrica establecida, conjugando a la perfección la libertad proyectual y el rigor constructivo.
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Nuestra propuesta no puede ni debe competir con el edificio, sino más bien complementarlo en las actuaciones ahora, 135 años después, requeridas y necesarias para su correcto funcionamiento normativo y funcional. Un proyecto de reflexión y detalle.
La primera fase introduce una gran área expositiva, métrica y modulada, así como los requeridos aseos adaptados y los nuevos accesos, exterior e interior.
En la segunda fase, recuperamos las bóvedas originales de los espacios del semisótano, convertidas ahora en las protagonistas absolutas, rehabilitando las antiguas cocinas y comedores del personal, completando la intervención con la nueva urbanización y el acceso general al edificio.